Tras ver los escombros en el sector de la catedral, la mayoría de los transeúntes consultados concuerda que pudo haber sido peor y que si hubiera sido hora punta habría que lamentar víctimas fatales. Esto principalmente tras el desprendimiento de cornisas y caídas de fachadas de diversos inmuebles ubicados en la zona céntrica, como por ejemplo los daños que afectaron a la fachada de la principal iglesia católica de La Serena y casas residenciales en el sector del barrio Almagro principalmente. Desde el municipio, los reparos y críticas no se hicieron esperar y fue el propio alcalde de La Serena quien manifestó su molestia, debido a que “creo que debemos tomar en cuenta esto y no permitir que el Casco Histórico se siga dañando. Por lo tanto, a pesar, que la ciudad resistió bastante bien, eso no significa que tenemos que dejar de preocuparnos. Tenemos que hacer un segundo Plan Serena, invirtamos recursos, pero no sigamos poniendo trabas burocráticas que hoy nos impiden hacer arreglos urgentes. Por ejemplo, para poder estucar una casa tenemos que pedir permiso al Consejo de Monumentos Nacionales” agregó el edil serenense que, “está bien que esta institución cuide el patrimonio, pero que no lo cuide tanto porque acá está claro que necesitamos agilidad y necesitamos además que las decisiones las tomemos acá en la comuna, en nuestra región y no en Santiago. De una vez por todas debemos terminar con le centralismo sobre todo en estos temas que necesitan una solución inmediata”.